
La Orquesta Sinfónica de Orihuela cierra agosto con una ovación de pie en Las Colinas Golf & Country Club
Las Colinas Golf & Country Club se despidió de agosto con uno de los aspectos más destacados de su calendario cultural de verano: una noche luminosa de música interpretada por la Orquesta Sinfónica de Orihuela (OSO). Rodeados por la belleza natural del complejo, más de 300 invitados fueron tratados a un concierto que combinó el jazz, los clásicos de Broadway y las adaptaciones sinfónicas de las leyendas pop españolas Julio Iglesias y Nino Bravo.
Bajo la dirección del maestro Antonio Pujol, el OSO entregó un programa de notable variedad, unido por la saxofonista soprano Rafa Lozano y la poderosa voz de la cantante Carolina Reymundo. La demanda del concierto fue tan alta que los organizadores ampliaron la capacidad para acomodar a la multitud, asegurando que nadie se perdiera esta anticipada tradición de verano.
La primera mitad de la noche fue un viaje a través de estándares de jazz atemporales, con interpretaciones memorables de Todo yo (Seymour Simons), Puttin ‘en el ritz (Irving Berlín), Cabaret y Todas esas tonterías (John Kander), Hojas de otoño (Johnny Mercer), y Moonglow (Will Hudson). La audiencia respondió calurosamente, cautivada por la elegancia y energía de la orquesta.


La segunda mitad cambió a una paleta más contemporánea. Las actuaciones emotivas de Reymundo de Memoria (Andrew Lloyd Webber), Leonard Cohen’s Aleluya, Soñé un sueño (Claude-Michel Schönberg), Sentirse bien (popularizado por Michael Bublé) y Gershwin’s Verano Dibujó algunos de los aplausos más fuertes de la noche. Arreglos sinfónicos de los favoritos del pop español, incluidos homenajes a Nino Bravo, Julio Iglesias y Alaska, agregaron un toque local, antes de que el programa cerrara con Mark Cally’s Mr. Zoot Suitque puso de pie a toda la audiencia.
El concierto, organizado por el Departamento de Cultura de Orihuela en colaboración con el Alicante Provincial Council y Las Colinas Golf & Country Club, fue libre de asistir y alcanzó plena capacidad una vez más. “La música lleva su propio tipo de magia, y anoche lo sentimos una vez más”, dijo Javier Rodríguez, director de operaciones de Las Colinas. “Fue un honor dar la bienvenida a la Orquesta Sinfónica de Orihuela y compartir una noche de cultura al más alto nivel. Esperamos continuar esta tradición”.
Más allá de la música, los asistentes disfrutaron de la atmósfera relajada de la zona checkout del lugar, con un DJ en vivo y camiones de comida antes y después de la presentación, un complemento perfecto para una noche de música sinfónica de clase mundial.
Introducido solo el verano pasado, esta serie de conciertos se ha convertido rápidamente en un hito cultural en la costa, trayendo música de alta calidad tanto a los residentes locales como a la afluencia de visitantes nacionales e internacionales durante la temporada de vacaciones.
Imagen cortesía La Colinas Golf & Country Club