
A pesar del tráfico de pasajeros récord, el gobierno español ha rechazado una vez más las llamadas para construir una segunda pista en el aeropuerto Alicante-Elche.
En respuesta a la creciente presión, particularmente de los políticos y grupos empresariales locales, la administración del primer ministro Pedro Sánchez sostiene que no hay una necesidad inmediata de la expansión.
El tema fue reavivado por una carta formal de Agustín Almodóbar, senador de Alicante y representante del Partido Popular (PP), quien argumentó que el reciente aumento del aeropuerto, más de 18 millones de pasajeros en 2024, con más de dos millones agregados solo en el último año, las mejoras terminales actuales de los alumnos. Instó a Sánchez a aprobar la inversión en una segunda pista, llamándola tanto “necesaria” como “justificada”.
En respuesta, el gobierno central reiteró su postura: la infraestructura actual del aeropuerto Alicante-Elche es adecuada para manejar la demanda de tráfico aéreo y garantizar las necesidades de movilidad de los ciudadanos. El gobierno señaló la estrategia de planificación de infraestructura del operador del aeropuerto Aena, que alinea las inversiones con demandas operativas reales y crecimiento proyectado del tráfico.
Según su respuesta, los nuevos desarrollos, incluida una segunda pista, solo se iniciarían cuando las métricas de rendimiento lo justifiquen y con una amplia planificación anticipada.
Las autoridades enfatizaron que el aeropuerto Alicante-Elche “nunca se ha saturado” y destacó que los esfuerzos futuros se centrarán en expandir la terminal existente en lugar de agregar una segunda pista.
Afirman que la pista actual tiene suficiente capacidad operativa para acomodar fluctuaciones en el tráfico aéreo en los próximos años.
Si bien el gobierno reconoció que una segunda pista se describe en el plan maestro del aeropuerto como parte de su máximo potencial de expansión, enfatizaron que la construcción solo procederá en función de criterios técnicos que muestran una clara necesidad.
En particular, este plan se compartió con los grupos empresariales de Generalitat y Local en abril de 2024, y el proyecto de expansión terminal ya se ha puesto a licitación.
El gobierno insiste en que la expansión terminal satisfará la demanda futura, mejorará la calidad del servicio de pasajeros y aumentará la eficiencia operativa.
También enfatizaron su compromiso de garantizar que el aeropuerto Alicante-Elche experimente “crecimiento sostenible en términos económicos y ambientales”.