El trabajo está en marcha para eliminar una parcela de tierra a lo largo del barranco del río Nacimiento en Orihuela Costa, donde se planean 64 casas adosadas. Sin embargo, el Ayuntamiento de Orihuela aún no ha emitido el permiso de planificación necesario.
Originalmente, el sitio fue designado para 24 casas unifamiliares más grandes, pero una modificación del proyecto casi ha triplicado el número, ahora proponiendo casas semi-detacidas entre 90 y 95 metros cuadrados cada una.
Durante la semana pasada, los tractores han estado limpiando la vegetación del sitio de Campoamor, generando preocupación entre los residentes locales. En respuesta, la recién formada Asociación de Residentes de Costa Campoamor se está preparando para solicitar formalmente la oficina del alcalde, el departamento de planificación urbana y los asuntos costeros para revocar el estado desarrollable de la tierra.
Los residentes argumentan que la construcción en esta área propensa a las inundaciones pondría en peligro a los futuros propietarios y bloquearía el flujo de agua natural durante las fuertes lluvias.
A pesar de estas preocupaciones, el Departamento de Planificación Urbana insiste en que el proyecto ha obtenido las aprobaciones de inundación y ambientales necesarias de la Autoridad de la Cuenca del Río Segura.
Los grupos ambientalistas, incluidos Friends of the Sierra Escalona (ASE), se oponen firmemente al desarrollo, destacando que la trama está adyacente a una “Zona 1 de Peligro 1”, la categoría de riesgo de inundación más alto. Argumentan que ninguna casa debería haber sido autorizada tan cerca del río Nacimiento.
Más complicando las cosas, el sitio se encuentra en un área clasificada con riesgos geomorfológicos bajo el Plan de Prevención de Inundaciones de la Comunidad Valenciana (Patricova).
En 2003, el Ayuntamiento aprobó un cambio de plan parcial que permite el desarrollo residencial en el sector de campos y-1. Los grupos públicos ahora exigen que esta aprobación sea revocada debido a los mayores riesgos de inundación.
Además de la controversia, el actual concejal de planificación urbana Matías Ruiz fue anteriormente el ingeniero civil que redactó el proyecto original hace dos términos legislativos. Ruiz ha aclarado que ya no tiene ninguna participación con el desarrollo en su papel actual.
Los residentes, los ambientalistas y los grupos cívicos continúan presionando a las autoridades locales y regionales para que detengan el proyecto antes de que se haga daños irreversibles.