Murcia, España – 2 de junio de 2025 – Una persecución policial salvaje, un automóvil arrojado en la carretera y un alijo de 34 botes gigantes de gas risueño: suena como una trama de películas, pero es el último giro impactante en la región de la escena de drogas de la fiesta subterránea de Murcia.
En un busto dramático doblado “Operation Hit Tox” La Guardia Civil se apoderó de 5,000 dosis de óxido nitrosocomúnmente conocido como gas risueño, después de que el conductor de un vehículo sospechoso huyó de la policía local en la noche de la noche en noviembre pasado en el tranquilo suburbio de Baños y Mendigo.
El hombre detrás del volante no se quedó para charlar. En cambio, lo disparó más tarde Abandonando el coche de alquiler—Cuamente había sido recogido en el aeropuerto de Murcia-Corvera, en el hombro de la autopista A-30 hacia Cartagena.
¿Adentro? Una mina de oro de evidencia:
- 34 cilindros de gas presurizados
- Docenas de globos y boquillas de plástico
- A Lector de tarjetas con 14 recibos de pago que van desde € 10 a € 70
- 735 € en efectivoen varias denominaciones
Los botes de servicio pesado, cada uno lleno de 615 gramos del gas, son suficientes para llenar miles de globos de fiesta, un popular pero tendencia peligrosa en clubes y raves callejeros. Las autoridades estiman que el suministro incautado podría haber producido más que 5,000 dosissuficiente para alimentar un festival de fin de semana completo.
Después de meses de investigación, la Guardia Civil rastreó al sospechoso, un local de Murcia, y lo arrestó por cargos de delitos de salud pública bajo Artículo 359 del Código Penalque podría llevarlo a prisión por hasta tres añosmás una multa considerable y una prohibición profesional.


No hay materia de risa
El óxido nitroso no es tan inofensivo como su nombre indica. A menudo inhalado a través de globos, el gas puede causar alucinaciones, confusión y daño nervioso a largo plazo. En los peores escenarios, puede conducir a la asfixia o a la muertesegún la Agencia de Medicamentos Españoles.
Las autoridades advierten al público que el máximo aparentemente “divertido” puede volverse trágico, y que tratar o distribuir el gas sin una autorización adecuada es un delito penal grave.
El equipo incautado, el vehículo de alquiler y todas las pruebas están ahora en manos de los investigadores, ya que el sospechoso espera más procedimientos legales.
En pocas palabras: La fiesta se acabó para este empujador de globo rebelde.