Permítame proponer una teoría: El esquema fenicio es la tercera parte de lo que nos referiremos libremente y extraoficialmente como la ‘vida de una trilogía de cineasta’ de Wes Anderson. 2021 El despacho francés fue su oda descarada para los Maverick American Journos and Culture Writers de los años 50 y 60, sin embargo, cuando se lleva a Longview, también es una película sobre la que está fascinada con el proceso de escritura en sí, particularmente cómo la mente humana esculpa la realidad con el uso de herramientas literarias y documentales. La película se trata de encontrar entretenimiento en lo aparentemente mundano, y el propio Anderson podría soportar cualquiera de los escribas en exhibición. Luego, en 2023, obtuvimos la joya metainemática, Ciudad de asteroidesuna película que se trata de dirigir, pero más específicamente, el proceso de dramatización, como en, cómo transponemos estos textos fantásticos al medio visual.
El esquema fenicioentonces, se aleja un poco del arte convencional de la escritura y la dirección, y aquí tenemos una historia sobre la producción, y las personas cuyo papel está en una película para unir un plan. Es cuestionable si Anderson ve que esta trilogía es específicamente un reflejo de sus propios métodos personales, pero estas tres películas cuando se toman en concierto comprenden una disertación de arriba a cola sobre las alegrías y los traumas de hacer películas. Este proyecto es, en muchos sentidos, su réplica cinemato Reino de risas de la luna.
Obtenga más pequeñas mentiras blancas
En este caso, existe la sensación de que Anderson siente que hacer una película es menos un acto de habilidad o saber más de lo que es un acto de diplomacia y asegurarse de que tenga las personas adecuadas lo suficiente como para que todo suceda. Benicio Del Toro es presentado como un traficante de armas melancólico llamado Zsa-Zsa Korda, padre de una pequeña falange de hijos jóvenes inquisitivos (a quienes obliga a vivir en una casa al otro lado de la calle desde su propio manejo similar al castillo), y una hija, una hija y semi-froteada y semi-fumadora nombrada Hermana Leisl (Mia Threepleton). Debido a sus diversas travesuras desestabilizantes en la región, se ha convertido en el objetivo de múltiples intentos de asesinato (fallido), pero al igual que un gato que acaba de quemarse durante su octava vida, ahora se lo atiende un momento de reflexión existencial.
Del Toro interpreta a Zsa-Zsa como un pícaro intrépido que se niega a detenerse en un pasado a cuadros. No ve ironía o buena suerte en su capacidad para sobrevivir, y trata todos los aspectos de la vida en un tono de alta seriedad casi grandiosa. Cuando está volando su jet privado y el casco comienza a tambalearse, desde la turbulencia quizás o un misil entrante, mirará desde su último material de lectura de la puerta (generalmente un libro de texto entomológico seco), y asegurará a sus compañeros de sus pasajeros sobre su total falta de preocupación. Al igual que con un productor de cine, llega a un punto en su carrera en el que no puede permitirse tener miedo de trivialidades como antagonismo personal, estrés financiero, lesiones físicas o muerte desde arriba, y eso es ZSA-ZSA a una camiseta.