Juan Ignacio López-Bas Valero, un abogado en ejercicio y ex concejal de Orihuela, así como un ex miembro del parlamento de Ciudadanos, ha provocado un debate público a través de un artículo de opinión que se publicó en Diario de la Vega.
En él, insta a los residentes de Orihuela a desafiar formalmente el reciente y aumentado impuesto a la recolección de desechos urbanos (RSU), describiendo la situación como injusta y legalmente cuestionable.
El impuesto, administrado por Suma, ha aumentado dramáticamente, entre el 250% y el 340%, dependiendo del área, lo que provoca preocupación y descontento entre la población local.
López Bas argumenta que el gobierno municipal no cumple con la ley española. Dado que Orihuela se clasifica legalmente como un “municipio de gran población”, la ley exige que establezca un organismo administrativo especializado para manejar las apelaciones económicas-administrativas, particularmente para revisar los acuerdos fiscales emitidos por el Ayuntamiento. Sin embargo, Orihuela no ha creado este cuerpo obligatorio, privando a los ciudadanos de un canal administrativo legal para impugnar las decisiones fiscales antes de recurrir a los tribunales.
Debido a esta deficiencia, López BAS afirma que las evaluaciones fiscales realizadas sin proporcionar este recurso administrativo son legalmente inválidos.
Apoya su posición citando fallos judiciales de ciudades como Alicante, Madrid y Santander, donde los jueces han anulado asentamientos fiscales similares sobre la base de que la ausencia de tales organismos municipales viola el derecho constitucional de los contribuyentes a una protección judicial efectiva.
Alentando la acción cívica, López Bas afirma que cada contribuyente tiene el derecho, e incluso el deber, de desafiar las acciones administrativas cuando las autoridades ignoran los procedimientos legales a sabiendas.
Aconseja a los residentes que presenten un reclamo económico-administrativo dentro de un mes de recibir cualquier factura de impuestos municipales, ya sea por RSU, impuestos a la propiedad (IBI), impuestos de vehículos o ganancias de capital (más valía).
Si el Ayuntamiento rechazó o ignora estas afirmaciones, alienta la escalada a la corte, donde cree que los precedentes existentes apoyarán la postura pública.
Su llamado a la acción ya ha resonado en toda la región. Los representantes de la comunidad costera y rural han expresado interés en buscar afirmaciones similares.
El grupo Unidos X La Costa está preparando activamente la documentación para ayudar a sus miembros a presentar apelaciones. Otros grupos políticos locales, como Unidos Mejoramos y PIOC, están monitoreando el panorama legal para determinar sus próximos pasos.
En esencia, López Bas está movilizando una resistencia legal de base contra lo que él ve como una política fiscal ilegal y excesiva por parte del gobierno municipal de Orihuela.