Y así, un universo de diversión, amistad y moda está llegando a su fin.
Michael Patrick King, showrunner de la secuela de “Sex and the City” “y justo así …”, anunció en Instagram que la serie terminará después de que concluya la tercera temporada. Los fanáticos tienen un final de dos partes para saborear a finales de este mes.
“Con gran gratitud agradecemos a todos los espectadores que han dejado que estos personajes entre en sus hogares y sus corazones durante estos muchos años”, escribió.
King dijo que decidió concluir mientras escribía el episodio final de la temporada. Luego dividió el final en dos episodios. El último episodio caerá el 14 de agosto.
En una larga y sincera publicación de Instagram, Sarah Jessica Parker, quien interpretó al icónico personaje de Carrie Bradshaw en ambas series, llamada la secuela “All Joy, Adventure, el mejor tipo de trabajo duro junto con el talento más extraordinario”. Ella incluyó un montaje de la moda y los momentos de Carrie.
Parker agregó: “Estoy mejor por cada día que pasé contigo. Será una eternidad antes de olvidar. Todo. Gracias a todos. Te amo”.
Parker, Kristin Davis y Cynthia Nixon regresaron para la secuela. En gran parte ausente Kim Cattrall y su Samantha Jones, aunque Cattrall hizo un cameo breve y sin acreditar en el final de la temporada 2. La ausencia de Samantha se explicó como una mudanza a Londres. Los informes de salarios y disputas personales burbujearon detrás de escena.
La serie original funcionó de 1998 a 2004, tomando por asalto la cultura pop con el estilo y el drama de los 30 amigos de los 30 y tantos años en la ciudad de Nueva York. Compraron. Buadearon. Salieron, apoyados el uno del otro como Parker’s Carrie, un escritor, lo relató todo.
La secuela recoge sus vidas a mediados de los 50, a críticas mixtas. Carrie se convirtió en viuda. Miranda Hobbes de Nixon salió como queer. El Charlotte York Goldenblatt de Davis hace frente al diagnóstico de cáncer de próstata de su esposo Harry.
La moda sigue siendo siempre presente, incluidos todos esos tacones icónicos que todavía se abren a través de las calles bordeadas de piedra rojiza de Nueva York.
En su publicación de despedida, Parker escribió sobre su elegante Carrie que “cambió de casa, zonas horarias, novios, su mente, sus zapatos, su cabello, pero nunca su amor y devoción a la ciudad de Nueva York”. Llamó a Carrie “mi latido profesional durante 27 años”.